Marco Rubio acusa al régimen de Ortega de reprimir a la Iglesia y amenazar la estabilidad regional
El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, denunció recientemente la persecución religiosa en Nicaragua durante una conferencia de prensa en Costa Rica, según informó CBN News. Acompañado por el presidente costarricense Rodrigo Chaves, Rubio afirmó que el régimen de Daniel Ortega ha tomado medidas drásticas contra la Iglesia Católica y otros grupos religiosos en un intento de consolidar su control absoluto en el país.
[Estamos en WhatsApp. Empieza a seguirnos ahora]
"En el caso de Nicaragua, se ha convertido en una dinastía familiar con una presidencia donde han tratado de eliminar, por ejemplo, a la Iglesia Católica y todos los religiosos. Cualquiera que represente una amenaza para el régimen ha sido castigado", declaró Rubio.
Estas acciones, según él, forman parte de una estrategia más amplia para silenciar a cualquier voz disidente que pueda desafiar la autoridad del gobierno nicaragüense.
Rubio también relacionó esta represión con la crisis migratoria que enfrenta la región, señalando que el escenario nicaragüense, así como el de Venezuela y Cuba, ha obligado a miles a huir del país. "Si no fuera por esos tres regímenes, no habría una crisis migratoria en el hemisferio", afirmó. Esta observación destaca la conexión entre las políticas autoritarias y las olas migratorias que afectan a América Latina y Estados Unidos.
Como informó Diario Cristiano Internacional en días recientes, el fuerte aumento de los ataques contra los cristianos en Nicaragua en los últimos dos años incluyó el aumento de ataques contra iglesias evangélicas, según un informe del Centro Europeo para la Ley y la Justicia (ECLJ).
En la conferencia de prensa, el Secretario de Estado mencionó el rol de Nicaragua en el Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos (CAFTA), afirmando que, aunque en un principio el país fue incluido para fortalecer la democracia, la realidad es diferente en la actualidad. "Hoy en día, hay que reconocer que Nicaragua no es una democracia, no funciona como una democracia", sostuvo Rubio.
Esta gira refuerza el compromiso de Washington con la estabilidad en Centroamérica, en un contexto marcado por el auge de gobiernos autoritarios y los retos migratorios. Las declaraciones de Rubio subrayan la postura de Estados Unidos frente a los regímenes que considera represivos y su interés en promover la democracia y los derechos humanos en la región.
Rubio es conocido por su postura firme frente a gobiernos autoritarios en América Latina, como los de Cuba, Venezuela y Nicaragua. Durante su reciente juramentación como Secretario de Estado, reiteró su compromiso con los valores democráticos. Durante su discurso, señaló: “prometo trabajar incansablemente para defender los intereses de Estados Unidos y para apoyar a quienes luchan por la libertad y la democracia en todo el mundo”.
En esa ocasión Rubio fue juramentado por el vicepresidente JD Vance con su mano sobre una Biblia versión NVI. Luego de tomar juramento pronunció un discurso al final del cual reconoció a Jesucristo como su Señor y Salvador sin el cual no le hubiera sido posible recibir tal honor.
La situación en Nicaragua continúa siendo un punto focal en las discusiones sobre derechos humanos y democracia en América Latina. Las denuncias de persecución religiosa y la represión de voces disidentes plantean desafíos significativos para la comunidad internacional en su esfuerzo por apoyar la libertad y la justicia en la región.
El régimen de Ortega desde 2018 ha emprendido abiertamente una guerra contra los cristianos en represalia por la oposición pacífica a una reforma de la seguridad social, señaló el informe del ECLJ, con sede en Estrasburgo, Francia.